El Entusiasta
El Entusiasta es una persona alegre, divertida y positiva. La estrategia de este estilo de personalidad se basa en disfrutar de la vida, de aprovechar todas las oportunidades que se nos ofrecen para ser felices y evitar todas las cosas desagradables y aburridas.
Aquí nos encontramos la “Pasión” de la Gula, un impulso por estimularse a base de poner la atención en todo aquello que nos proporcione placer, de proyectar en nuestra mente futuros escenarios donde todo es magnífico. Desde pensar en el vino que vamos a saborear en nuestro restaurante favorito o lo divertido que será salir con los amigos, hasta planear las siguientes vacaciones con todo lujo de detalles, y todo en nuestra imaginación sale a pedir de boca…
El problema del eneatipo 7 es cuando la realidad no cumple las expectativas iniciales, la frustración y el desánimo nos puede invadir rápidamente y llevarnos a un estado difícil y poco agradable, contaminado además por la rabia de la decepción. Pero el entusiasta reacciona rápido, formula nuevos planes y se regocija de nuevo en su imaginación, “esto sí que va a salir bien, ya lo verás…”, y si no es así lo vuelve a intentar, planificar es algo que se le da muy bien.
Tanta planificación necesita disponibilidad, la libertad de poder decidir lo que le apetece es muy apreciada, por eso huye de los compromisos como si fueran enfermedades, comprometerse es atarse a una sola opción si alternativas. Aunque también para esto tiene recursos este eneatipo tan mental, si hay que romper el compromiso lo hace sin muchos miramientos, después encuentra la manera de justificarse mediante una poderosa capacidad para racionalizar cualquier cosa, para todo encuentra una explicación convincente y si no te convence, te confunde con su veloz discurso, y antes de que te des cuenta ya se a ido a hacer lo que le apetece.
Una manera muy efectiva de comprender los estilos de personalidad es a partir de personajes de series y películas, en esta página os dejamos algunos ejemplos…
Estrategia principal: Esforzarse por experimentar entusiasmo
El objetivo de este estilo de personalidad es la búsqueda de estímulos, centrarse en todas las posibilidades y opciones para sentirse bien, divertirse, etc. La premisa es que la vida es para vivirla y que el sufrimiento no es una elección inteligente. Son personas optimistas, que se empeñan en ver el lado bueno de las cosas y evitar todo lo negativo.
En su mejor versión
Son personas inteligentes, brillantes, con una gran habilidad para relacionar ideas, hacer descubrimientos e invenciones.
Son alegres y optimistas y contagian este positivismo a los demás con su sola presencia. Son agradecidos por lo que tienen, reciben todo en la vida como un regalo y les encanta compartir momentos de felicidad con los demás.
Enérgicos, talentosos y habilidosos, se centran en hacer de este mundo un lugar para ser feliz.
La versión más neurótica
La Pasión de la Gula se transforma en una frenética búsqueda de estímulos y distracciones para evitar tomar contacto con el sufrimiento interior. La Planificación es irrealista y desorganizada, nada se concluye, todo queda en intenciones y en una gran frustración que solo lleva a tratar de imaginar más planes con los que ignorar la realidad.
La relaciones son instrumentales, no se tiene en cuenta los sentimientos de los demás. Charlatanes, fanfarrones, embaucadores y fraudulentos, todo vale para sacar beneficio propio. Los impulsos no se pueden reprimir ni postergar y el comportamiento se torna altamente inestable e impredecible.
La Pasión dominante: La “Gula”
Nuestra atracción por el placer nos mueve hacia aquello que nos lo proporciona, mientras que nuestra aversión al dolor nos alerta para permitirnos huir de cualquier amenaza. Así nos encontramos impulsados a vivir en búsqueda del placer y a evitar el sufrimiento, aunque la mayoría de nosotros nos regimos por este principio en algún grado, esta es la dificultad que caracteriza el punto Siete.
Hoy en día disponemos de muchas maneras de satisfacer este llamado principio del placer, es en sí lo que alimenta el consumismo de los tiempos en que vivimos, y alcanza un estado de insaciabilidad que se convierte en una adicción a una búsqueda de estimulación y excitación constante.
También disponemos de modos de evitar el sufrimiento y las dificultades, mediante distracciones, ensoñaciones y fantasías para evadirnos del momento presente, de hecho el hábito de escapar a nuestro propio mundo mental es un síntoma de que estamos tratando de evadirnos de alguna sensación desagradable.
La pasión que estamos tratando aquí es la “gula”, una avidez o excesiva indulgencia por el placer, por satisfacer los deseos. La gula es sobre todo un deseo por consumir, pero en el sentido de probar y sentirse estimulado, no en el sentido de consumir hasta saciarse, que sería más característico del tipo Ocho. Es un apetito mental más que corporal, en el que el placer reside más bien en el estímulo que en el consumo, y esto inevitablemente conduce a una sensación de insatisfacción o insuficiencia, que acaba en la búsqueda de más estimulación.
La fijación: La “Planificación”
La certeza de que podemos planificar nuestra vida, y que si la planificamos bien todo va a salir perfecto, sin tener que hacer grandes esfuerzos por nuestra parte. La creencia de que la vida puede ser vivida sin sufrir, que sufrir es algo que podemos evitar tomándonos la vida de otra manera, pues el sufrimiento no sirve para nada. Ser feliz es lo que da sentido a la vida y que se puede ser feliz simplemente con desearlo.
Las Alas
Cada eneatipo tiene cierta influencia de los eneatipos de los lados, lo que llamamos las alas. Si un eneatipo tiene más influencia de una ala que de otra decimos que esa es su ala, aunque no siempre esto se define con claridad ayuda a distinguir un ala de la otra como un subtipo diferente.
Eneatipo 7 con ala 6
Se conoce como “El Animador”.
Se trata de un subtipo muy magnético, que frecuentemente despierta simpatía grupal, debido a su notable carisma desde el buen humor y la cordialidad alegre. Le resultan afines de forma natural tareas que impliquen las relaciones públicas, las ventas en las que es necesario entusiasmar al cliente, la industria del espectáculo, el turismo, los medios de comunicación, la publicidad, el marketing, y todo lo que conlleve diversión y entretenimiento.
Eneatipo 7 con ala 8
Se conoce como “El Realista”.
Este subtipo tiene su eje más que en los vínculos, en su propia persona, el ala ocho le aporta un aspecto más centrado, más duro y ligado a la acción. Es un gran disfrutador del mundo, con una fuerte tendencia hedonista, hallando placer y sentimiento de poder en sus logros materiales, en los que suele ser muy exitoso, debido a su carisma y su desbordante energía, aumentada por la influencia del Ocho. Tiene también un nivel de ambición mucho más marcado que el otro subtipo.
Los Subtipos Instintivos
Los subtipos instintivos son el resultado de combinar un tipo psicológico con un instinto dominante. En la teoría del Eneagrama se contemplan tres instintos básicos: el de autoconservación, el sexual y el social; lo cual hace que multiplicando por los nueve tipos principales, obtengamos 27 subtipos. No hay subtipos puros, sin embargo en cada uno de nosotros influye de diferente manera un instinto u otro.
Autoconservación
Conocido como “Familia / Oportunidad”
Es un Siete más terrenal, más sensual y enfocado en los placeres de la vida. Su fuerte instinto de conservación le convierte en una persona pragmática, muy materialista, que busca en todo momento la oportunidad de ganar algo, de hacer un buen negocio o de hacer una amistad que le sirva de beneficio en el futuro. Desarrollan un talante generoso y amable, pero puede ocultar una intención de utilizar a los demás para sus planes…
Sexual
Conocido como “Sugestionabilidad”
Es un Siete más narcisista, que se gusta mucho a sí mismo y que le encanta lucirse ante los demás. Son muy soñadores, todo lo quieren ver de color rosa, en vez de terrenal es celestial, vive en las nubes y no le gusta bajar, crea su paradisíaca realidad en su imaginación y contrarresta la frustración con esa gran capacidad de sugestionarse y sugestionar a los demás. Le encanta hablar convencer a los demás de que el mundo de Peter Pan existe, y si no le creen se retira a su país de Nunca Jamás, porque ellos si necesitan creerlo…
Social
Conocido como “Sacrificio / Entusiasmo”
Este es el Siete contrapasional, el que no quiere parecer un Siete, no quiere que le vean como alguien egoísta, sino como una persona pura, buena y virtuosa, llena de buenas intenciones. Son sociales y saben que las personas egoístas no hacen tantos amigos, por eso es fácil pensar que es un Dos, no se ve la Gula porque la ocultan y la transforman en una buena voluntad mediante la que pretenden contagiar a todos de su deseo de felicidad para el mundo, les gusta verse como santos, como visionarios, y esconden el profundo anhelo de ser idolatrados y aplaudidos. Por eso son entregados y dedicados, hasta que se aburren o tienen un plan mejor, entonces desaparecen como el humo, pero sin perder su encantadora sonrisa.
Eneatipo 7 en la pareja
El eneatipo 7 en la relación de pareja aporta alegría, diversión, fantásticos planes, etc., es prácticamente imposible aburrirse con ellos, pero si ellos se aburren contigo desaparecen rápido. No llevan bien el compromiso de una relación estable, salvo que se sientan libres en todo momento de poder hacer lo que quieran. Tampoco se les da muy bien acompañarte en los malos momentos, las emociones negativas les perturban demasiado y tratarán de ayudarte con su elocuente discurso hasta que no puedan evitar verse afectados y se retiren…
Eneatipo 7 en el amor
Eneatipo 7 en series y películas
Subtipo sexual.
¿Ángel o demonio? Lo primero que sorprende es esa mezcla de malote con alma de niño, Lucifer insiste en verse a sí mismo como la reencarnación del mal, algo que le proporciona lo que más desea su enorme gula, hacer lo que le apetezca en cada momento sin tener que pensar en las consecuencias, y menos aún en las personas. Parece que siente un fuerte rechazo a ser bueno, a que le importe ser juzgado por sus actos, un miedo a que alguna voz interna, disfrazada de moralina, le impida disfrutar de la vida sin control y sin medida. Sin embargo, por alguna misteriosa razón, consigue hacerse querer, consigue que le consientan sus caprichos y que le perdonen sus faltas, consigue parecer un niño que solo hace travesuras, que en el fondo no tiene mala intención, que solo quiere jugar y hacer amigos.
Seductor omnipotente, que utiliza a las personas como fuente de placer, se encuentra perdido y desconcertado en el mismo momento en que la inspectora de policía no cae rendida a sus encantos. Ella representa lo inaccesible, lo no puede ser manipulado a su antojo, algo que no solo le desconcierta, sino que le atrae como una promesa de lo que nunca ha conseguido alcanzar, el amor. Pero nada da más miedo a este subtipo que las emociones auténticas, las que no se pueden fabricar, sino que están en contacto con su mundo interior y nacen de él, aquel lugar del que nada quiere saber, donde se encuentra su verdadera alma, su infierno, como no…
Representa, Lucifer, de manera muy clara la principal característica del narcisista, la incapacidad de ver a nadie aparte de sí mismo. Toda la lógica de su mente está al servicio de una existencia epicúrea, todo razonamiento lleva al mismo sitio, “yo”, nada más que yo. Si no me proporciona placer no me interesa, si hacer algo por ti no me va a beneficiar no me interesa, ¿por qué me iba a interesar? Un razonamiento que siempre observa su única ley, la vida se vive una vez y no tiene sentido perder el tiempo en cosas que no te hacen feliz, ni en personas, por supuesto. No es casualidad que sea propietario de un local de ocio nocturno, donde puede beber, drogarse y sobre todo tener sexo, todo el que quiera y de todas las maneras. Un local que utiliza además como un refugio, donde acude cada vez que la vida se pone seria, difícil o desagradable.
También nos ofrece este personaje esa actitud de mente brillante que todo lo sabe y que todo lo alcanza, que puede pasar de un salto de la torpeza y la falta de comprensión sobre cualquier asunto de sentido común, al ya lo sé todo y ya no me interesa que me digas más porque en un segundo mi mente ya ha llegado más lejos que la tuya, antes no sabía ahora ya sé más que tú. Así consigue proteger su pobre autoestima cada vez que tras acudir a alguien de su entorno en busca de consejo acaba haciendo lo que le da la gana, porque “me he dado cuenta yo”, como no…
Más triste es cuando se encuentra en esos momentos en que observa su interior, sus motivaciones y sus traumas. Cuando reconoce que no es más que un niño consentido, que no tiene justificación ninguno de los actos egoístas que le describen, que no es capaz de ser auténtico, que tiene que hacer el payaso para sentirse rodeado de personas, y que en el fondo se odia, se odia porque de tanto buscar el placer su vida no tiene un rumbo fijo, que tanto utilizar a las personas como si fueran cosas han provocado una soledad interior insoportable, que cuando se mira bien en su espejo narcisista acaba viendo un monstruo.
Lo más doloroso es el final de la serie. Después de todo acaba como empezó, siendo el rey de nada, en un mundo que no existe, y dolorosamente solo. Al fin y al cabo, tiene que darse cuenta de que por mucho que persiga el placer lo que en realidad busca es el amor, pero tanta tierra quemada no permite que ese amor prometido pueda echar raíces, así que hay que retirarse a vivir en las nubes de nuevo, en este caso en el infierno…
Subtipo conservación.
Siempre de buen humor, siempre positivo. Es lo que se dice una persona optimista que piensa que va a conseguir todo lo que se propone, y si no le sale bien vuelve a empezar, no se desanima, su cabeza vuelve a planear atractivos objetivos que, aunque no se consigan solo de pensarlo él ya está contento. La principal característica de este subtipo es la constante búsqueda de la oportunidad para conseguir dinero, un dinero que necesita para poder comprar todos las cosas que le gustan y poder pasarlo bien. Un personaje sencillo pero que curiosamente se complica la vida continuamente. Eso si, siempre con una sonrisa en la cara…
El Siete conservación suele tratar de formar familias, normalmente de amigos, donde puede conseguir todo lo que se propone mediante su personalidad carismática. Enredar a sus vecinos es lo que mejor se le da, a todos les saca algo o los enreda para participar en sus planes, y así acaba debiendo favores y dinero a todo el mundo. Cualquier conversación es una oportunidad para conseguir algo, todo lo ve en forma de negocio, pero todo lo que consigue lo gasta en un momento, acabando siempre endeudado y metido en líos.
Este subtipo es además el prototipo de hombre playboy, que trata de conseguir las chicas más guapas mediante el despliegue de todos sus recursos tanto materiales, como coches y objetos de lujo, como mediante su locuaz discurso, con el que convence a cualquiera de que si le sigue todo será una aventura emocionante que nunca olvidará…
Claro que todo está en el aire (o en su imaginación) y se sostiene poco tiempo, los demás se cansan de promesas incumplidas, de que solo va a la suya, así que al final otra vez solo, planeando nuevas formas de volver a la cresta de la ola.
En fin, un eneatipo Siete hedonista como nadie, un compañero divertido con el que nunca te aburres. Eso sí, ten cuidado antes de que te haya llevado a la ruina con sus planes, porque su mente no para de trabajar para sacar algún provecho de cualquier situación, o de cualquier persona.